Stay on this page and when the timer ends, click 'Continue' to proceed.

Continue in 17 seconds

Voluntarios recogen 6,000 libras de basura en la costa de Piñones durante un evento de limpieza

Voluntarios recogen 6,000 libras de basura en la costa de Piñones durante un evento de limpieza

Source: El Nuevo Día

Loíza - El sol brillaba en la mañana de este sábado en la playa Vacía Talega, en Piñones. Entre la vegetación del litoral, decenas de ciudadanos, portando guantes y armados con recogedores de basura, miraban al suelo en busca de botellas, vasos, cubiertos y otros desperdicios sólidos que han quedado atrapados en la arena.

Los voluntarios participaban en un evento de limpieza convocado por una coalición de entidades ambientales, y recogieron aproximadamente 6,000 libras de residuos a lo largo de unas ocho millas del litoral del famoso sector loiceño, desde Boca de Cangrejos hasta la playa Vacía Talega, en un período de dos horas, que comenzó a las 9:00 a.m.

Para Nicole Vargas, una de los aproximadamente 150 voluntarios que participaron en el evento, el trabajo de limpieza en la costa representa un "agradecimiento porque uno disfruta de ese espacio y todo lo que nos provee la naturaleza".

"Es algo que me parece importante, no solo en el impacto ambiental, sino en cuanto a la educación", manifestó Vargas, residente en San Juan. "Es frustrante que limpies un día y, a la semana, vuelvas a la misma playa y está igual de sucia. Pero esa semillita que sembraste en esos niños, en esos jóvenes o en esa misma comunidad es más a largo plazo", agregó.

Como parte de la iniciativa "Deja una huella limpia en Piñones", el evento de limpieza fue organizado por las organizaciones Arrecifes Pro Ciudad, Corporación Piñones Se Integra (COPI), LimPiaR, CRES, Estuario de la Bahía de San Juan y Fundación Surfrider.

"Lo que tenemos son vertederos clandestinos en lo que podemos llamar una de las áreas más bellas de todo Puerto Rico", lamentó Héctor "Tito" Varela, gerente de programas de la Fundación Surfrider. "(En la costa de Piñones) tenemos el bosque de manglares más grande de Puerto Rico, tenemos un sistema de dunas bastante saludables -que protege la carretera-, tenemos un hermoso mar, pero, entre medio, tenemos un gran problema de manejo de desperdicios sólidos".

Durante el evento, los ciudadanos recogieron desechos como botellas de agua plásticas y de vidrio de cervezas, pañales, cubiertos y platos desechables y empaques plásticos de bebidas alcohólicas. Otros desperdicios sólidos grandes, como "mattresses", televisores y restos de embarcaciones, serán removidos en el futuro con el equipo adecuado.

"Se hizo una preevaluación y se identificaron vertederos clandestinos o áreas de gran necesidad", recalcó Varela. "La idea de la dinámica es poder hacer un recogido de lo más superficial, botellas plásticas, botellas de cristal, para coordinar, eventualmente, para el año que viene, limpieza a nivel de maquinaria", abundó.

Bajo la sombra de las palmas, Luis de la Mora recogía botellas de agua y de cerveza del suelo. El residente en San Juan expresó que sentía satisfacción al participar en el esfuerzo de limpieza, aunque manifestó preocupación sobre la erosión costera y la basura que el oleaje posiblemente ya había arrastrado.

"En todos lados, no solamente aquí, hay problemas de falta de cuidado con la naturaleza", dijo De la Mora, de origen brasileño. "Me da gusto, me siento bien ayudando".

Mientras, en el área del terraplén de Piñones, Paola Colón, de 17 años, y otros jóvenes llenaron unas 35 bolsas de basura. La estudiante de American School enfatizó sobre la importancia de realizar la labor de limpieza para conservar el ambiente y de alentar a otras personas jóvenes a unirse a estos esfuerzos.

"Este sería mi último año en Puerto Rico y yo quería, antes de irme, dejar mi huella. Creo que esto es bueno para yo sentirme bien, para ayudar al planeta e influenciar a otros jóvenes a que participen en cosas como estas", expresó Colón, luego de haber concluido los trabajos de limpieza.

Entre los desperdicios en el área del terraplén, había 213 cubos de manteca llenos de aceite para cocinar, que representaban un riesgo ambiental y que, según el Estuario de la Bahía de San Juan, llevaban más de un año y medio en el lugar. La organización incurrió en el gasto de contratar una empresa para disponer del aceite.

La directora ejecutiva del Estuario de la Bahía de San Juan, Brenda Torres Barreto, lamentó que sean ciudadanos quienes tengan que hacerse cargo de la basura de otras personas.

"Esto es un día que no necesariamente nosotros, como ambientalistas, queremos ver. Nosotros no queremos que los ciudadanos se tiren a la calle a recoger la basura que otro ciudadano no dispone correctamente. Nosotros queremos que los ciudadanos estén ayudándonos a desarrollar una resiliencia costera, que es tan necesaria ante la situación de vulnerabilidad y el cambio climático", dijo Torres Barreto.